“Nos preocupan los riesgos del cannabis para la salud pública, pero somos partidarios de la legalización”
Fuente: eldiario.es. María Ramírez.
El jefe de Salud de Nueva York: “Nos preocupan los riesgos del cannabis para la salud pública, pero somos partidarios de la legalización”
Nueva York, pionera en la lucha contra el tabaquismo, se centra ahora en los daños del vapeo, los cigarrillos mentolados y el impacto de fumar marihuana tras la despenalización del uso recreativo, como explica el máximo responsable del Departamento de Salud de la ciudad, Ashwin Vasan.
Nueva York fue pionera en 2002 con su primera ley contra el tabaco para desincentivar su uso y limitar la exposición al cancerígeno humo de segunda mano. Pero más de dos décadas después, se enfrenta a nuevos retos también en este frente por el enfoque de la industria tabacalera en comunidades afroamericanas e inmigrantes y los potenciales daños de fumar marihuana, despenalizada para uso recreativo en el estado de Nueva York en 2021 (el uso medicinal es legal desde 2016 y lo es en la mayoría de Estados Unidos).
Fumar cannabis está prohibido en los mismos lugares donde no se puede fumar tabaco, es decir bares, restaurantes y cualquier centro de trabajo o estudio (incluyendo terrazas), parques, transporte público y privado, calles cercanas a escuelas, hospitales y plazas peatonales.
¿Cuál ha sido el impacto de las medidas antitabaco en los últimos 20 años?
El trabajo pionero de Nueva York en el control del tabaco es un ejemplo del poder de la salud pública para salvar vidas y prevenir sufrimiento a través de políticas, regulaciones y acciones comunitarias concertadas. Lo que hicimos en Nueva York hace más de 20 años sentó las bases no sólo para el país, sino para el mundo: fue la base para el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco. Estamos muy orgullosos de ese legado. Y, por supuesto, los resultados han sido muy claros en Nueva York. La prevalencia del tabaquismo se ha reducido a la mitad o menos, del 22% en 2002 a tan solo el 9% en 2020. Hay algunas pequeñas fluctuaciones en términos de medición y metodología. Hemos pasado, por ejemplo, del muestreo en papel y la encuesta telefónica a herramientas digitales. Así que algunas comparaciones son difíciles. Pero básicamente sabemos que el tabaquismo se ha reducido a la mitad. Y eso es un triunfo porque supone haber salvado decenas de miles de vidas que se habrían perdido por complicaciones del consumo de tabaco a largo plazo, incluidas enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia renal y cáncer. También existe relación entre fumar, la obesidad y la diabetes.
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